Cuidados antiedad para tu rostro

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¿Alguna vez te han echado más años de los que tienes? Si tu rostro refleja signos de envejecimiento que no corresponden a tu edad quizás deberías empezar a cuidar un poco mejor el colágeno de tu piel.

El colágeno es una molécula proteica generada por el cuerpo humano que representa más del 25% del total de las proteínas que forman parte de nuestro organismo. Es de suma importancia ya que produce las fibras colágenas, muy resistentes y flexibles, encargadas de aportar las propiedades características de las articulaciones, huesos, piel, músculos y tendones.

Aunque nuestro cuerpo crea esta proteína por sí mismo, llega un momento en el  que los niveles descienden y comienza el temido proceso de envejecimiento. En el caso de la piel, el contenido de colágeno en  la dermis disminuye un 1% cada año y este porcentaje puede ser mayor si nos exponemos a una excesiva radiación solar.

Tomar mucho el sol puede acelerar la parición de los signos de envejecimiento o daños cutáneos, como la piel reseca o las manchas que se observan a partir de los 20 años.

Signos de envejecimiento del rostro

El paso del tiempo va dejando su huella en nuestra piel y, a partir de los 30, se empiezan a notar las arrugas de expresión, los capilares dilatados, la pérdida de luminosidad, etc. Es con la llegada de los 40 cuando aparece la temida flacidez: los pómulos descienden, los párpados se engrosan y salen las bolsas en los ojos.

Con los 50, el envejecimiento de la piel es más significativo debido a los cambios hormonales sufridos durante la menopausia. La escasa producción de estrógenos  provoca la falta de luminosidad, se marcan notablemente los surcos malares y nasogerianos (arrugas que se forman entre la nariz y las comisuras de los labios); el rostro pierde definición y aparecen las arañas vasculares faciales (venitas rojas y moradas que afean la piel).

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Factores externos que envejecen nuestra piel

  • El sol: Como ya sabes, el sol es un aliado fatídico a la hora de cuidar nuestra piel. Lucir un exceso de bronceado puede pasarnos una factura muy cara a medio plazo y es que los rayos UVA, aparte de poder provocarnos enfermedades y daños muy serios en la piel, originan su envejecimiento prematuro.
  • La alimentación: Cuidar la piel desde dentro es tan importante como la aplicación de productos cosméticos de calidad. La dieta mediterránea rica en cítricos, verduras (sobre todo la zanahoria), carne, huevos, frutos secos, etc., y una buena hidratación diaria ¡son mano de santo!
  • Factores medioambientales: El frío, el calor y la contaminación influyen de manera poderosa en el estado de nuestra piel. Mantener una higiene facial adecuada con productos de calidad es básico para su perfecto cuidado.
  • El estrés: Las sustancias químicas que liberamos en periodos largos de estrés, en especial el cortisol, son perjudiciales para nuestro organismo y aceleran el envejecimiento, ya que causan una mayor oxidación celular.

Cuidados básicos para una piel joven

  • Protección solar: Hay que usarla siempre, no sólo en verano. Una crema protectora de un 30 FPS (Factor de Protección Solar) bloquea aproximadamente el 93% de todos los rayos UVB (la luz que causa las quemaduras en la piel). Es recomendable que consultes con un especialista el tipo de protección que más se adecue a las características de tu piel y habituarte a aplicar esta crema todos los días. No olvides tener en cuenta que la efectividad de la protección dura 5 horas. También existen cremas antiedad que ya incluyen el filtro de protección 15 SPF como la hidratante de sensilis  o SPf 30 como la crema hidratante de Endocare.

crema protección solar heliocare

 

  • Limpieza facial: Como bien sabes, el cuidado diario del rostro es la mejor garantía para mantener nuestra piel fresca y joven. Puedes seguir estos pasos para un cuidado facial básico:
    • Lavar bien el rostro dos veces al día: Por la mañana eliminaremos el exceso de grasa generado mientras dormimos y al final del día limpiaremos nuestra piel de maquillaje y contaminación.
    • Impregna un disco de algodón en agua micelar y pásalo suavemente por rostro, ojos, cuello y escote. El agua micelar es ideal para todo tipo de pieles y actúa con efecto calmante. Si llevas maquillaje o queda suciedad, repite la operación.
    • Utiliza un sérum para preparar la piel, aplicado a pequeños golpecitos.
    • Por último, no te olvides de tu crema hidratante para el rostro. Te recomendamos que uses una más ligera y fresca por la mañana, y otra más nutritiva y regenerante por la noche.
  • Tratamientos antienvejecimiento: El gesto de aplicar una crema hidratante es algo que hacemos de manera rutinaria desde jóvenes. Si en lugar de usar una crema hidratante cualquiera, empezamos a aplicar una crema antiarrugas con Q10, vamos ganando terreno a los signos de envejecimiento.

Además, te recomendamos que según tu edad y tu tipo de piel, sigas algún tratamiento específico de prevención de arrugas, flacidez y otras manifestaciones de fotoenvejecimiento cutáneo, como los que ofrecen las  ampollas antiedad Martiderm o el tratamiento antiedad global de Cumlaude Lab.

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La manera de aplicar el tratamiento antiaging también es muy importante para conseguir una mayor efectividad del producto.

 

Si mantenemos los cuidados antienvejecimiento adecuados y llevamos además una dieta sana y equilibrada, nos sentiremos mucho mejor tanto por dentro como por fuera, ya que los signos del envejecimiento serán menores y lucirás una piel joven.

2 opiniones en “Cuidados antiedad para tu rostro”

  1. Gracias por las recomendaciones. Personalmente ya llevo unos años usando heliocare excelente. Tomare sus recomendaciones. Es muy importante todos sus consejos para el cuidado de la piel
    Muchísimas gracias. Un cordial saludo

    • Gracias a ti, Rosy. Y ya sabes que aquí puedes consultar cualquier duda y encontrar información de tus productos antiedad favoritos. Saludos!

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